El procedimiento con Airflow se realiza en una sesión de limpieza dental. El higienista dental utiliza el dispositivo Airflow, que expulsa una mezcla controlada de agua, aire y polvo fino de bicarbonato de sodio o glicina a través de una boquilla especializada. Este chorro es dirigido a las superficies de los dientes y las áreas interdentales, desalojando y limpiando la placa y las manchas sin contacto directo con el diente.

Generalmente, una sesión de limpieza con Airflow se completa en una sola visita al dentista, y el procedimiento puede durar entre 30 y 60 minutos, dependiendo del estado de la higiene oral del paciente y del grado de manchas y sarro.

Los pacientes pueden esperar ver una mejora significativa en la limpieza de sus dientes con resultados inmediatos. Los dientes no solo se ven más limpios y brillantes, sino que la eliminación de placa y sarro también contribuye a la salud general de las encías y la prevención de la caries.

Después de una limpieza con Airflow, se recomienda mantener una buena higiene oral, incluyendo cepillado regular y uso de hilo dental. Aunque Airflow es menos abrasivo, es importante evitar comidas y bebidas altamente pigmentadas o ácidas durante las primeras 24 horas para maximizar los efectos del blanqueamiento.

En Cabdental, garantizamos que nuestras limpiezas con Airflow son realizadas por higienistas capacitados, utilizando equipos de última generación para proporcionar una limpieza profunda y cómoda. Nos comprometemos a ofrecer resultados de alta calidad que mejoren la salud y la estética dental de nuestros pacientes.