La extracción dental en niños se realiza bajo anestesia local para minimizar el dolor y la incomodidad. El dentista utiliza instrumentos especializados para aflojar y remover cuidadosamente el diente. Dependiendo del caso, se pueden tomar medidas adicionales para preservar el espacio y guiar la erupción de los dientes permanentes, como la colocación de un mantenedor de espacio.

Generalmente, la extracción de un diente infantil se puede completar en una sola visita. Sin embargo, se pueden requerir visitas de seguimiento para monitorear la curación y la correcta erupción de los dientes permanentes, así como para verificar la posición y función de cualquier dispositivo de mantenimiento de espacio.

Después de una extracción, los niños pueden experimentar alivio de dolor e incomodidad causados por el diente problemático. La extracción también ayuda a asegurar que el desarrollo dental continúe de manera saludable y sin impedimentos.

Tras la extracción, es importante seguir las indicaciones del dentista sobre los cuidados postoperatorios, que pueden incluir limitar la actividad física por unas horas, evitar comer alimentos duros o pegajosos, y mantener una higiene oral suave pero efectiva. También se pueden recetar analgésicos para manejar cualquier molestia post-procedimiento.

En Cabdental, garantizamos que todas las extracciones dentales infantiles se realizan con el máximo cuidado y atención al detalle, utilizando técnicas que minimizan la incomodidad y promueven una rápida recuperación. Nos comprometemos a asegurar la salud y bienestar de nuestros pequeños pacientes durante todo el proceso.